Si me hubieran preguntado antes del sábado si podía pasar que vayas a una fiesta de los 80 y que la música sea una mierda, hubiera contestado que no. Pero, aunque parezca imposible, hay alguien que es capaz de lograrlo, se hace llamar DJ Stuart. No podés ser taaaannn de madera chabón. Un verdadero desastre, cada vez que pasaba un par de buenos temas seguidos, cortaba la onda con algo de Fine Young Cannibals, Billy Idol, Love & Rockets o ¡¡¡Los Rolling Stones!!! O con alguno de esos temas medio marchosos que no conoce nadie. Además metía 70 y 90 como si nada, hay que regalarle un calendario o un libro de historia. Desubicadísimo. Poco Duran Duran, poco Erasure, nada de Pet Shop Boys ni de Camouflage. Poquísima onda, la gente se miraba. Encima capaz que ponía un tema bueno y lo dejaba 40 segundos, y enganchaba para la mierda, no sé para qué tanta bandeja. Para enganchar así te alcanza con un doble casetera pibe.

2 comentarios cómplices:

Soledad dijo...

solo para coincidir... hay dj que merecen garrote!!! y para coincidir con vos al haber seleccionado ese párrafo... muy bueno

Marce L. dijo...

lo gracioso es lo resentido e ignorante que es el tipo que la escribio.