Hay libros maravillosos. Hay libros amables. Hay libros que nos atrapan entre sus hojas y que no nos sueltan, ni siquiera después de haberlos terminado. Hay libros que nos propinan una cachetada sonora con la mano abierta y que nos retan a ser lo suficientemente corajudos como para seguir leyendo. Hay libros que nos pegan donde más nos duele. Hay libros de contenido evanescente, que nos atraviesan de punta a punta sin dejar la más mínima huella. Hay libros innecesarios. Hay libros imprescindibles. Hay libros-bodrios, que nos fascinan y nos repugnan con la misma fuerza. Hay libros atesorables. Hay libros descartables, que sólo sirven para avivar el fuego del asado del domingo. Hay libros cómodos, libros de bolsillo, libros pesados como cascotes. Hay libros para todos los gustos y para más de un disgusto.


2 comentarios cómplices:

Anónimo dijo...

.. y luego está Dan Brown, ese misterio editorial..

Lucas Fulgi dijo...

" Hay libros-bodrios, que nos fascinan y nos repugnan con la misma fuerza."

Me pasó mil veces... esos libros que sabés que son aburridos e igual te encantan.