martes, 16 de marzo de 2010

Realmente, un buen conversador, que sepa interesarse con sinceridad en un tema que no necesariamente sea el suyo, resulta muy, muy difícil de encontrar.

2 comentarios cómplices:

Ramiro dijo...

Ciertamente...

lau dijo...

uhm..
generalmente cierto, me parece que está ligado al egoísmo que nos caracteriza como raza humana.