Pocas citas son mágicas.
Otras veces nos preguntamos porqué estamos ahí, tratando de hilar una conversación con alguien a quién solo decirle Hola es prestarle más atención de la que merece. Pero la mayoría son como las que tuve con Claudio. Una pérdida de tiempo. Ni siquiera son lo suficientemente malas como para servir de material para el blog.
Estás ahí pensando: parece un buen tipo, pero no me interesa nada de lo que dice. Tratás de remontar la charla, de sacar otros temas, pero en realidad desearías estar en tu casa, tratando de ponerte un poco al día con las toneladas de series y películas que bajás y no tenés tiempo de ver. Menos mal que existe el turismo, porque si no, no sé de qué hablaríamos en esos casos… Pueden comparar sus últimas vacaciones o los lugares donde estuvieron. Suele funcionar bien como material de relleno y con suerte te podrías enterar de algún dato interesante. Recuerdo una cita donde no volví a ver a mi candidato, pero fue muy útil para averiguar que podía viajar al Uruguay mucho más barato por ColoniaExpress.
3 comentarios cómplices:
Jaja, leí más de la mitad hasta darme cuenta de que eso... lo había escrito yo :-)
Gracias por citarme.
Jajaja... muy buen post y genial el comentario de Amanda....!!!
Cómo debío ser de aburrido el tipo que no recuerda ni haber escrito de él....... jajaja
Muy bueno....!!!!!!!
Amanda, robarte la frase fue un placer. No sos la primera persona que confiesa que no se reconoce del todo en la frase. :)
Publicar un comentario